Se refiere a un enfoque estético en la odontología que se centra en mejorar la apariencia visual de la sonrisa de una persona. Este proceso implica una evaluación y planificación detallada para lograr una sonrisa más armónica, equilibrada y atractiva. Para llevar a cabo este diseño puede ser necesario el trabajo en conjunto de la prostodoncista, ortodoncista, entre otros, que trabajan en colaboración con los pacientes para entender sus objetivos estéticos y crear un plan personalizado.
Las técnicas y tratamientos utilizados en el diseño de sonrisa pueden variar según las necesidades individuales del paciente, pero a menudo incluyen:
1. Blanqueamiento dental: Para mejorar el color y el brillo de los dientes.
2. Carillas dentales: Finas láminas de material (como porcelana o resina compuesta) que se colocan sobre la parte frontal de los dientes para mejorar su forma, color o posición.
3. Implantes dentales: Para reemplazar dientes perdidos y restaurar la armonía de la sonrisa.
4. Coronas y puentes: Para mejorar la forma y función de los dientes dañados o faltantes.
5. Ortodoncia: Para corregir la alineación de los dientes y mejorar la mordida.
6. Bonding y armonización dental: Para ajustar la forma de los dientes mediante el desgaste o la remodelación.
7. Inyecciones de Botox y rellenos dérmicos: A veces, se utilizan para mejorar la estética de las encías y la región facial alrededor de la boca.
En resumen, el diseño de sonrisa se trata de personalizar y mejorar la estética dental de una persona para lograr una sonrisa más atractiva y confiada. Este enfoque no solo tiene en cuenta la salud dental, sino también la estética facial y la expresión general de la persona.